De la misma manera que comprar acciones es un proceso sencillo, en la actualidad existen maneras igual de simples para invertir en mercados globales, esquivando la conversión de monedas y regulaciones particulares de distintos mercados. Para ello, los ETFs ofrecen una llave que permite diversificar nuestro portafolio de una manera sencilla sin tener que comprar acciones individuales en diversas bolsas alrededor del mundo.
Con este artículo del blog de Folionet nos adentraremos en los mecanismos que nos pueden permitir comprar acciones en mercados globales de forma sencilla y cómo esto puede ayudar a que nuestro portafolio sea más diversificado, además de explorar brevemente la naturaleza de los distintos mercados disponibles.
Comprar un ETF internacional
Si nuestra intención es tener un portafolio diversificado con exposición internacional, el método más sencillo de lograrlo es a través de un ETF. Un fondo cotizado (exchange-traded fund) es un instrumento financiero que representa el desempeño acumulado de un grupo de acciones, por lo que nos abre las puertas a cientos de empresas sin la necesidad de comprar una acción de cada una de las empresas que nos interesa.
Los ETFs usualmente imitan el desempeño de un índice, como el S&P 500 o el Nasdaq, y para lograrlo tienen posiciones en las acciones que se agrupan en dichos índices.
Comprar acciones directamente de empresas que cotizan fuera de Estados Unidos puede ser complejo, por lo que un ETF nos puede ayudar a esquivar esos problemas y copiar el desempeño de índices internacionales de diferente naturaleza.
Sin embargo, si tomamos esta decisión debemos definir en qué clase de territorio queremos invertir, pues los mercados globales son heterogéneos y muy diferentes entre sí.
Invertir en mercados europeos
A diferencia de las bolsas en Nueva York, los mercados europeos están marcados en las últimas décadas por mantener un crecimiento más moderado y no tan expuesto al crecimiento e innovación de la tecnología. Aunque esto no significa que sean poco rentables, suelen mostrar mejor el desempeño industrial de los grandes países europeos.
Incluyendo empresas como BMW, Allianz, Inditex y Louis Vuitton, el índice STOXX Europe 600 representa a las 600 empresas más grande del viejo continente, representando cerca de €11,8 billones de euros en valoración. Por ello, muchos ETFs enfocados en el mercado europeo utilizan este índice como referencia.
En este caso, los ETFs centrados en Europa suelen tener una representación de empresas provenientes de todos los países europeos desarrollados.
Invertir en mercados latinoamericanos
Considerado por muchos un territorio por descubrir, los inversores buscan en América Latina oportunidades en mercados que se diferencien de los tradicionales y que puedan otorgar ganancias en tiempos de poco crecimiento.
En general, los mercados emergentes latinos y sus empresas se caracterizan por una mezcla de sectores, incluyendo materiales básicos, como el petróleo, y llegando a las empresas tecnológicas, como Mercado Libre (MELI).
Si bien estos países son más propensos a la inestabilidad política y cambios económicos, América Latina está caracterizada por su desarrollo urbano y el auge en adopción tecnológica.
Invertir en mercados emergentes
Una de las regiones más populares entre inversores con exposición internacional es Asia, marcada por tres mercados diferentes.
Por un lado, Japón representa una economía desarrollada, con empresas tecnológicas e industriales. En años recientes, el mercado japonés ha estado influenciado por la deflación y una recuperación constante pero lenta de su índice llamado Nikkei.
Como alternativa, China representa un mercado de crecimiento rápido, incluyendo grandes empresas tecnológicas, pero significativamente influenciado por la política del país. Al mismo tiempo, Hong Kong representa un mercado alternativo a China, independiente de ésta y fuertemente relacionado al sector bancario y financiero.
Por último, India es uno de los mercados de mayor crecimiento en la última década, con una composición diversa que incluye manufactura, tecnología y materias primas.
Considerada como una región dinámica, en los últimos años han surgido rumores por el interés global de evitar la dependencia de China, siendo India el país candidato para sustituir el suministro chino.

ETFs para invertir globalmente
Los fondos cotizados (ETF) ofrecen una manera sencilla de ganar exposición a los mercados internacionales, proporcionando diversificación y potencialmente mitigando los riesgos asociados con la selección de acciones individuales.
Para los inversores que buscan exposición a los mercados europeos, por ejemplo, existen acciones como el ETF Vanguard FTSE Europe (símbolo VGK), enfocado en Reino Unido, Francia, Alemania y otras economías importantes.
Mientras tanto, ejemplos como el ETF iShares Latin America 40 (símbolo ILF) abarca países como Brasil, México y Chile para invertir en América.
Adicionalmente, el ETF iShares MSCI Emerging Markets Asia (símbolo EEMA) incluye exposición a China, India, Japón y otras economías asiáticas emergentes.
Siendo estos algunos de los ejemplos más comunes, existen múltiples alternativas para expandir nuestro portafolio. Pueden existir, por ejemplo, ETFs enfocados en un solo país de estas regiones, o diversificados para un sector en específico. Es importante resaltar que una investigación sobre la naturaleza de los activos que nos interesan siempre será necesaria.
Al mismo tiempo, tomar la decisión de inversión en mercados globales también implica una exposición a riesgos distintos, especialmente en territorios amenazados por la inestabilidad política o la fragilidad de sus monedas.